Un montaje fotográfico muestra a los tres componentes esenciales de la ITB en acción. |
ITB - Batería Costera Exocet en Malvinas
Entrevista con el CL (R) Ing. Julio Pérez
Por Santiago L. Aversa
SA: - Almirante, coméntenos por favor cómo llega,
profesionalmente, a ese mes de junio de 1982; cómo fueron su carrera, sus
estudios...
CL JP: - Egresé como Guardiamarina de la Escuela Naval
Militar en 1958 (promoción 85). Luego cursé la carrera de Ingeniería
Electrónica en la Universidad de Buenos Aires. Posteriormente, en 1967 se hace
un concurso en la Armada, para enviar en comisión de estudios a un oficial a la
Facultad de Ingeniería en Roma. Yo obtuve la comisión y fuí a especializarme en
guiado y control de misiles.
Luego de ello trabajé en CITEFA, haciendo Investigación y
Desarrollo en el área de misiles. Hacia 1975, comencé -junto con otros
oficiales- a realizar los estudios de instalación del MM-38 Exocet en los
destructores Fletcher, Sumner y Gearing que teníamos por ese entonces. También
realizamos estudios sobre la probabilidad de impacto del GWS Mk. 30 Sea Dart,
de la integración del AM-39 al A-4Q y una preselección de misiles SAM para la
Flota de Mar. En esa época pensábamos que se iban a adquirir los Type 21, mas
luego se adquirieron los MEKO 360H2.
Luego hacia 1976 instalamos los MM-38 en nuestros
destructores de entonces (Py, Bouchard, Seguí y Piedrabuena).
SA: - En los meses anteriores al conflicto, cuáles fueron
sus funciones?
CL JP: - En 1981 fui en comisión a Francia donde
supervisé la recepción de los AM-39 para los SUE (aviones Super Étendard), como
así también la entrega de un banco de control y prueba de misiles EXOCET, mucho
más avanzado del que teníamos, y que nos permitía testear en la BNPB a la
familia entera de esos misiles.
En FEB 82 instalamos el banco nuevo en la BNPB, y el 20
MAR 1982 yo estaba en Buenos Aires. Pese a tener varios compañeros de promoción
en la operación Rosario, me enteré de ella una vez que era un hecho consumado,
por los diarios.
A fines de ABR 82, se produce un problema con el banco de
prueba; no se podían recorrer misiles en la BNPB por lo que me desplazo hasta
allí y, merced al esfuerzo de un destacado equipo de técnicos del Taller de
Misiles podemos resolver el problema. Cuestión no menos oportuna, pues
regresaba la ARA (P-32) Guerrico, con un contenedor de misil averiado por el
duro combate de Grytviken.
El contenedor presentaba un impacto que había impactado
en la unión entre el propulsor del misil y su unidad de control, pero sin
afectar al misil en sí, Pero otro impacto en la manguera de cables había
provocado la entrada de agua de mar haciendo perder la aislación a la manguera
de unos 15 cables, por lo que hubo que recorrer y reparar el cableado.
También recorrimos luego los R-550 Magic de la FAA, que
habían llegado en un B707 desde Libia. El estado general de estos misiles era
malo, algunos incluso vinieron con arena. Nosotros no habíamos siquiera
desembalado el banco de pruebas Magic del programa SUE ya que según contrato
participarían los técnicos franceses en la puesta en marcha, pero en la
emergencia lo pusimos en funcionamiento con el apoyo de los técnicos del Taller
de Misiles.
En el interín, en la BACE se trabajaba febrilmente para
instalar los AM-39 en los SUE. Pese a la ausencia de técnicos franceses se pudo
superar un escollo que los franceses pensaron que no podríamos superar: la
colimación o alineamiento entre el binomio Super Etendard y el misil AM-39
EXOCET, tarea que requiere un complejo trabajo y, sobre todo, datos precisos
(ángulos, etc.). Pero esta información nosotros la habíamos obtenido durante
nuestra estadía en Francia, por lo que el personal de BACE pudo colimar los
misiles, declarándolos aptos para el combate en la EA32, con los resultados
conocidos por todos...
SA: - Ya estamos casi en MAY 82, en ese entonces que
ocurrió?
CL JP: - Me destacaron a Brasil, donde supuestamente
recibiríamos cinco AM-39. De más está decir que nunca llegaron, a los dos días
me comuniqué con mis superiores y emprendí el regreso a Buenos Aires, mas
finalicé ese periplo en Puerto Belgrano ya que el Taller de Misiles estaba
trabajando a pleno.
A mediados de Mayo, me llamó el CL Allara, quien me
preguntó sobre la factibilidad de desmontar la instalación de Exocet de algún
buque y llevarla a MLV como batería costera. Ello a los efectos de responder al
incesante cañoneo naval británico; atacaban todas las noches sin que pudiésemos
responder el fuego.
Le contesté que esa tarea demandaría unos 45 días, y que
el sistema sería engorroso de transportar; fíjese que la instalación de a bordo
consta de unos siete racks de una altura cada uno de alrededor de 1, 8 metros
por 50 cm de profundidad y 60 cm de ancho a lo que hay que sumar las mangueras
de cables (que internamente llevan de 15 a 30 cables individuales). A su vez,
habría que cortar parte de la estructura del buque para poder retirar los
racks, etc.
El Alte. Allara me contestó que no se podía esperar tanto
tiempo a lo que le dije que trataría de hacer algo más rápido y que se adecuase
más a las necesidades del momento.
Me junté en el arsenal con los técnicos Shugt y Torelli,
destacados jóvenes que ya habían trabajado conmigo en la instalación del banco
de control de misiles y en las instalaciones de nuestros viejos destructores y
empezamos a trabajar en un sistema de circunstancia, que denominamos ITB,
"Instalación de Tiro Berreta", como un chiste entre nosotros por la
precariedad del sistema.
Así creamos unas "cajas", en realidad
computadoras "caseras" con las que comenzamos a medir las corrientes
y señales que recibía y transmitía el misil.
SA: - Podría explayarse sobre cómo realizó esas pruebas?
CL JP: - Usamos un simulador del autodirector que se
conoce como "Simulador Vector". Es un mock up del lanzador, con una
ventanita de TV que permite simular el autodirector del MM-38 así como permite
verificar las señales que recibirá el misil. Este se instaló en uno de los
buques y fuimos probando distintas tensiones verificando las señales que
recibía el "Simulador Vector". Tenga en cuenta que eliminábamos toda
la instalación de a bordo para reemplazarla por tres cajas y una serie de
circuitos electrónicos que diseñamos y armamos sobre la marcha. Ello a los
fines de poder evitar la, repito, pesada y compleja instalación de a bordo.
Una vez que el misil ha sido armado (calienta giróscopos,
etc.), el buque le envía una "palabra" (stream de datos) de 64 bits.
El misil la envía de vuelta al buque, donde el sistema compara lo enviado con
lo recibido. De ser iguales, el buque envía una segunda "palabra",
que ya contiene algunos parámetros reales de lanzamiento. Una vez más, el misil
devuelve los datos y el sistema compara. Si no se presentan inconvenientes, se
envían por última vez los datos -64 Bits- ya con la información completa del
lanzamiento (Posición, ancho de ventana de búsqueda, profundidad de la ventana,
altura de vuelo, etc.). Si el misil devuelve correctamente los datos, se
produce el disparo.
Decidimos entonces, merced a nuestras "cajas",
que enviaríamos tres veces los datos reales (la tercer "palabra" de
una secuencia normal de tiro). Cuando logramos replicar esto, se comenzó a
buscar un generador que pudiese entregar una tensión trifásica de 400 ciclos y
una de 60 ciclos. En ese momento, estimábamos un 80% de probabilidades de que
el sistema funcionase. Efectuamos luego 15 lanzamientos con el simulador de
vector, que, en teoría, nos dieron OK. Así quedó el sistema en dos catafalcos,
uno con dos MM-38 (extraídos del ARA (D-25) Seguí) y otro con el generador, un
viejo Siemens de tecnología de los años 30, usado en los reflectores antiaéreos
en esa época por la Infantería de Marina.
SA: - Tengo entendido que el cruce a las islas fue
accidentado....
CL JP: - Mire, cargamos los dos carretones en sendos
C-130 Hércules de la Fuerza Aérea Argentina. Salimos de Espora y llegamos a
Comodoro Rivadavia, donde armaríamos el plan de cruce a las islas. Salimos de
noche, en vuelo rasante; yo veía las salpicaduras en el plexiglass. El avión no
podía virar a menos que se elevara (cosa suicida pues sería un blanco fácil) ya
a la altura que volaba hubiese metido parte del ala en el mar. Cada media hora
ascendíamos brevemente para un "golpe" de radar a fin de detectar si
había algún buque enemigo y continuábamos rasante. Quiero destacar la profesionalidad
y el valor de los pilotos de transporte de la Aviación Naval y la Fuerza Aérea,
volando de noche a ras del mar. Son merecedores de un gran reconocimiento.
En fin, a las tres horas de vuelo se nos infoma que el
aeropuerto estaba siendo atacado, por lo que debimos regresar. Como dato
anecdótico le comento que hacía dos años que yo había dejado de fumar, pero
tras el primer cruce -abortado- apenas llegué a Comodoro bajé y me compré un
cartón de cigarrillos (risas).
Recién al tercer intento pudimos cruzar con los dos
C-130. Apenas llegamos pusimos a los dos carretones en un galpón de Puerto
Argentino. Al día siguiente, el CL Otero (Jefe Naval en las islas) me asigna
dos TF IM para el sistema. Ellos eran los TF IM Rodríguez y el TF IM Abadal A
ellos se sumó el TF IM (RE) Ríes Centeno, a la sazón productor de "La
Aventura del Hombre", que se encontraba con un equipo de filmación en las
islas. A ellos se los interiorizó del funcionamiento del ITB. Luego se sumó a
Ríes Centeno el Sgto. Sánchez (Ejército Argentino) que operaría el Radar RASIT,
único radar disponible para la obtención de blancos, pese a que era un radar de
vigilancia terrestre.
SA: - Cuéntenos un poco sobre la operación del ITB, su
puesta en batería...
CL JP: - Bueno, primero le comento que el RASIT nos daba
los datos en milésimas y nosotros operábamos en grados y kilómetros, por lo que
hubo que desarrollar una tabla de conversión para poder alimentar los datos en
la unidad correcta al misil; ello lo hicimos ya en las islas.
El sistema iba en los dos remolques, más un carretón para
llevar los lanzadores (pues no podían desplazarse en el carretón de montura).
Merced a una grúa los poníamos en la montura, que luego debía ser colimada con
el RASIT y estabilizada. Debíamos desplazarnos por el único camino asfaltado
entre la localidad y el aeropuerto; era imposible ponerlo en la turba pues se
hundiría irremisiblemente.
Al oscurecer (alrededor de las 1800 horas) comenzaba la
maniobra de montado, y el lanzador estaba en batería a las 2200. A eso de las
0400 comenzaba la maniobra de desmontaje para guardarlo en un galpón, a fin que
con las primeras luces del día no se apreciase la instalación.
SA: - Cómo fueron los lanzamientos?
CL JP: - El 06 JUN 1982, a eso de las 0100 se
"engancha" un buque con el RASIT. Alimentados los datos al misil, se
intenta en lanzamiento pero el misil "no sale". Realmente estábamos
decepcionados, pero decidimos esperar y realizar un nuevo lanzamiento (debíamos
esperar por unos veinte minutos a la descarga de los condensadores para
alimentar nuevos datos al sistema). Ese tiempo era debido a lo precario de la
instalación; como le dije era "berreta, berreta". Sin embargo, con la
excitación del momento no tomamos el tiempo y efectuamos un segundo disparo; yo
pensé que había pasado una hora pero, en los hechos, fueron aproximadamente
-según me refirió luego Ríes Centeno- cinco minutos. El misil salió, lo vimos
perderse en la noche, sólo veíamos la llama de la tobera. El misil salió
desviado hacia la derecha y no sabemos al día de hoy donde cayó... solíamos
decir que "no lo encontraron ni los peces"... tuvimos una gran
frustración, si bien habíamos probado que mecánicamente era factible el
disparo. Cabe agregar que el rebufo nos arrojó, a mi y a mi equipo, varios
metros por el aire. Uno de los Ttes. de Inf. de Marina "aterrizó"
sobre una caja que contenía mis notas, tablas y apuntes. A oscuras, nos
encontramos buscando los papeles que se habían desparramado.
Hicimos un requerimiento por más misiles que fue atendido
por un C-130 de la FAA en la noche del 07 al 08 JUN. Mientras tanto, revisamos
completamente la instalación. Con la ayuda del Sr. Sanders (del equipo de Ríes
Centeno) descubrimos que se había quemado un diodo. Casualmente, en el único
componente inglés del sistema. Me comuniqué con el jefe del Batallón Antiaéreo
de la Infantería de Marina (BIAA), que defendía Puerto Argentino. Necesitábamos
un diodo, casi le diría cualquier diodo similar. Pero la casualidad dio que,
dentro de la panoplia de repuestos del sistema "Tiger-Cat" (de
dotación en el BIAA) estaba el mismo diodo. Mismo número de Stock, misma
especificación. Realmente fue un milagro!!!
Pero los buques no aparecían, si bien no conocían al ITB
(esto lo supe posteriormente). Ello llevó a la que creo que es una de las anécdotas
más pintorescas de la guerra...
El TF Rodríguez nos contó que cuando era
"michi", un Guardiamarina recién graduado, se encontraba en un arduo
ejercicio en el terreno, al borde de su resistencia física. Junto con algunos
compañeros, bailaron el "Uka Uka", la danza india de la lluvia, como
en las películas de cowboys. Se largó una lluvia de tales proporciones que hubo
que evacuarlos del terreno, dando final al ejercicio.
Siendo la situación de nuestras fuerzas tan complicada,
yo estaba dispuesto a hacer la danza... esto fue a las 2300 del 11 JUN... y
efectivamente bailamos el "Uka Uka"...los dos tenientes y yo en plena
oscuridad y sin que nadie nos viera.
A eso de las 0200 del 12 JUN, se cruza un buque por
delante de nuestro lanzador, y Ríes Centeno lo capta con el RASIT, al límite de
su alcance.
CL JP: - Sí, lanzamos un misil... vimos, como en la
oportunidad anterior, a la tobera perdiéndose en el negro horizonte. Luego
vimos un relámpago -quizás un Sea Cat del buque?- y una explosión. El misil
había impactado.
Por la radio, en el aire se armó una terrible batahola,
se saturaron los canales. Tantos días de soportar el bombardeo británico habían
sido contrarrestados. Eramos conscientes que esto no cambiaba el rumbo de la
geurra, pero fue un logro personal y profesional muy grande, amén de haber
levantado la moral de la guarnición en horas tan críticas.
Al día siguiente, los ingleses no aparecieron frente a
Puerto Argentino...
SA: - Cómo fueron las últimas horas de la guerra para Vd.
y su equipo?
CL JP: - Bueno, en la mañana del 14 JUN intentaron
bombardear el depósito del ITB, no sabemos si a propósito. Cuando la caída era
inminente, me apresto con el Tte Rodríguez con unas granadas de mano para volar
la instalación. Pero el Sr. Alte Otero me dice: "vea, Pérez, los ingleses
tienen Exocet?". Le respondo: "Sí, señor". Entonces me dice:
"No lo vuele... no van a aprender nada sobre el Exocet, pero que vean con
qué le dimos a un barco de ellos, que conozcan la capacidad de la Armada
Argentina".
Fuimos tomados prisioneros por los ingleses, yo les daba
ni nombre, mi número de matrícula, conforme a la Convención de Ginebra... y
ellos insistían en que yo había llegado por el Exocet, a lo que yo le respondía
que no, que yo estaba para reparar equipos de comunicaciones y esa era la
función de los Capitanes de Fragata de la ARA... en cierto modo nos sonreíamos:
ellos sabían y yo sabía, fué como una partida de poker.
Cabe destacar que hablaban perfecto castellano, si bien
uno de ellos cometió un furcio, un anglicismo: pese a que yo negaba todo, al
final me felicitó por ser tan "ingenuo", en lugar de ingenioso... yo
le entendí, pues evidentemente no hablabamos de ingenuidad sino de ingenio
("ingenuity") y capacidad.
Carretón con dos lanzadores de misiles MM-38 Exocet |
T CL JP: - ras la guerra, acepté, a través de la Armada
Argentina, dar entrevistas a distintos medios del exterior. En el 2001, por el
vigésimo aniversario de la campaña, me entrevistó la BBC. Ahí se dieron dos
circunstancias: una, que yo quise felicitar al comandante de la Glamorgan por
la maniobra de dar popa al misil, y uno de los miembros de la BBC me dijo que
la maniobra no la había ordenado el comandante sino el oficial de guardia en el
puente, Ian Skipp, que era pariente suyo. Hoy mantengo una cálida relación
epistolar, vía e-mail, con él.
Otra, que también pude grabar un mensaje para la Sra.
Madre de David Tinker, un Teniente de la Royal Navy fallecido en nuestro ataque
al Glamorgan. Sus cartas al hogar fueron compiladas y editadas como libro (N.
del R., publicado en Argentina como "Cartas de un Marino Inglés")
tras la guerra.
Yo le comenté a esta señora que lamentaba la pérdida de
su hijo, que había sido una guerra sin odios, que nosotros peleábamos por lo
nuestro, como ellos habían peleado por lo que creían suyo.
SA: - Estimado Alte. Pérez,
CL JP: - Muchísimas gracias por el maravilloso mensaje
que ha grabado. Por supuesto que lo perdono con todo mi corazón, y lo entiendo
perfectamente.
Lamentablemente, mi marido falleció en Abril de 2000,
pero estoy segura que él sentiría lo mismo.
Estoy muy agradecida de que siempre recuerde a nuestro
David.
Que Dios lo bendiga, y nos traiga paz a todos.
Elisabeth Tinker
(Madre de David Tinker)
SA: - Por último, una pregunta de actualidad (N de R: La
nota fue publicad en el año 2002). El año pasado la ARA consiguió homologar el
AM-39 en los PH-3 Sea King. Es esto, en cierto modo, una continuación de la
escuela, un gran logro en términos de tecnología e integración de sistemas?
CL JP: - Desde ya. En la Armada Argentina se trabaja muy
bien. Y no se lo digo por ser marino, se lo digo objetivamente, como ingeniero.
Fíjese que los trabajos de recorrida de misiles que se le hacen en Puerto
Belgrano a las Armadas amigas cuentan con el total respaldo de la empresa
Aerospatiale a tal punto que ellos firman la garantía por el trabajo que
efectuamos nosotros. Esto es un hecho inaudito, pues claramente el Taller de
Misiles no es una subsidiaria de la Aerospatiale. Es, de facto, un reconocimiento
a la capacidad y eficiencia de nuestros técnicos, civiles y militares.
No hay comentarios:
Publicar un comentario