Buque oceanográfico comienza la segunda etapa de la campaña antártica

EN USHUAIA

Buque oceanográfico comienza la segunda etapa de la campaña antártica

El ARA “Puerto Deseado” que tiene su puerto de destino en la Base Naval Mar del Plata, partió el pasado lunes 10 por la noche desde la Base Naval Ushuaia, con científicos a bordo hacia la zona de islas Orcadas.

USHUAIA - El buque oceanográfico “Puerto Deseado” comenzó la segunda de las cuatro etapas en las que está organizada la Campaña Oceanográfica y Antártica de Verano 2010/2011. Zarpó del muelle comercial de la ciudad de Ushuaia, donde estuvo tres días, con una nueva dotación de científicos hacia la zona de las islas Orcadas.
Desde la unidad aseguraron haber cumplido con todos los proyectos de investigación impuestos por el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y el Ministerio de Defensa (MINIDEF) para la primera etapa, que finalizó cuando llegaron a Ushuaia y realizaron el recambio de personal y equipos científicos, como así también de la logística necesaria para el comienzo de la segunda y extensa fase de la campaña.
Su objetivo es efectuar en 90 días estudios de índole oceanográfico, hidrográfico y de monitoreo ambiental de distintas especies típicas de altas latitudes y su impacto en el ecosistema del océano austral.
Con la intención de continuar las investigaciones sobre las masas de agua que rodean al continente antártico, el buque gobernará hacia el sudeste con destino hacia las islas Orcadas.
Se desarrollarán proyectos tendientes a determinar las fallas principales del extremo meridional de Sudamérica y noroeste de la placa de Scotia, monitoreo de aves y mamíferos marinos de la región, estudios de la fauna íctica en la zona de Península Mitre y relevamiento de datos hidrográficos para la confección de nueva cartografía digital en la zona, entre otros.
Como es común en estas latitudes, la meteorología es un factor determinante, debiendo guardar especial atención a la evolución de la misma, la que condiciona la navegación y la realización de los proyectos.
Próximos a cruzar el temido y respetado pasaje de Drake –porción de océano que separa a América de la Antártida y donde confluyen los vientos más hostiles del planeta– el buque continúa con su labor diaria en pos del conocimiento del mar para contribuir con su accionar a la solución de problemáticas mundiales.

Primera campaña

El buque oceanográfico ARA “Puerto Deseado”, al mando del capitán de corbeta Maximiliano Mangiaterra, participa de la Campaña Antártica de Verano 2010-11, la primera desde el convenio firmado entre el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y el Ministerio de Defensa (MINIDEF), en 2009.
El viernes 31 de diciembre de 2010, con una tripulación aproximada de 128 hombres y mujeres, dejó atrás su habitual apostadero en la Base Naval Mar del Plata para desarrollar actividades de investigación en los mares australes y la península antártica.
“Ya hemos cumplido en el año más de 120 singladuras y 18.000 millas náuticas navegadas en tareas de investigación en el Mar. Festejamos la Navidad en el Mar y ahora también recibiremos el Año Nuevo rumbo a la Antártida. Toda la tripulación ha sido un ejemplo de sacrificio, abnegación, afición vocacional y espíritu marinero. Estamos muy motivados para dar inicio a la CAV 2010-11. Sabemos que además de un desafío profesional para nosotros, también lo será para la comunidad científica ligada a las ciencias del mar y proyectos de investigación antártica. Sentimos un profundo orgullo de contar con este tipo de Unidad y contribuir a la investigación en el Mar”, había declarado el capitán Mangiaterra, antes de zarpar de Mar del Plata.
A los marinos de la Armada Argentina se sumaron científicos del CONICET, la Universidad de Buenos Aires (UBA), Centro Austral de Investigaciones Científicas (CADIC), Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP), Universidad Nacional de La Plata (UNLP), Servicio de Hidrografía Naval (SIHN), Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP) y Dirección Nacional del Antártico (DNA) e Instituto Antártico Argentino (IAA).

Por: Oscar Filippi