domingo, 4 de agosto de 2019

El Almirante Irízar se prepara en Buenos Aires para la Campaña Antártica de Verano 2019/20


El rompehielos (Q-5) ARA Almirante Irízar - RHAI, llegó a la Dársena Sur del Puerto de Buenos Aires,  luego de haber zarpado el pasado lunes de la Base Naval Puerto Belgrano. Allí el buque será sometido a pruebas de máquinas en mar antes de la Campaña Antártica de Verano 2019/20, según indicó la Armada Argentina.
El buque llegó este sábado al mando del Capitán de Navío Maximiliano Mangiaterra , quien explicó que “para conservar un buque de este tipo que se lo somete a una gran carga y esfuerzo de trabajo en la Antártida, todos los años se le hacen tareas de mantenimiento para poder preservarlo. En Puerto Belgrano se le hizo la pintura del casco, verificación de las hélices, los timones y además se aprovechó esta navegación para hacer pruebas finales de aceptación del buque”.
“En este astillero que es donde se concretó el proyecto de reparación y modernización del buque se seguirán realizando los ajustes finales para que definitivamente entre en servicio operativo al cien por ciento”, concluyó el Capitán Mangiaterra.
Por su parte el Segundo Comandante del rompehielos, Capitán de Corbeta Héctor Vera, refiriéndose al rompehielos, afirmó: “Además de la modernización en los sistemas y máquinas, este buque le dio a la Armada Argentina capacidades que antes no tenía, sobre todo en lo que se refiere a la investigación científica. Las nuevas instalaciones de Sanidad cuentan con equipos de avanzada tecnología, asegurando de esta manera cirugías de ciertas complejidades en caso de ser necesario”.
“Todas estas cualidades lo convierten en un buque único en el hemisferio Sur, ya que tiene la capacidad de llevar 300 personas, 2 helicópteros, además de hacer actividades logísticas en la Antártida que es su principal función”, destacó el Segundo Comandante.

Adiestramiento a bordo
En esta oportunidad embarcaron en comisión tenientes de fragata profesionales y alumnos de la carrera de Ingeniería Naval de la Universidad Tecnológica Nacional y de la Universidad de Buenos Aires, los cuales realizaron prácticas laborales recorriendo los diferentes cargos del buque.
A su vez, cadetes de 2°, 3° y 4° año de la Escuela Naval Militar en sus actividades diarias cubrieron guardias en el puente de comando, sala de máquinas y tomaron clases de navegación y bengalas, el objetivo de que incorporen conocimientos como futuros oficiales de Marina. También efectuaron ejercicios de lucha contra incendio, rol de abandono, y control de averías que se hicieron a lo largo de la navegación junto con la totalidad de la tripulación.

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